Entradas

Iván, la Victoria de mi vida.

 Iván, la Victoria de mi vida. Nadie jamás me dio tanta luz, para nadie me he convertido nunca en una figura tan importante, nunca antes (ni jamás) otra persona fue capaz de marcar los tiempos como él sin hacer apenas nada, ese don de tatuar el alma con sólo su existir. Su vida marca a fuego la mía, colmando las más bonitas sensaciones y sentimientos en mi corazón, llenando mis recuerdos de las más gratificantes historias que contar, brindándome un título, el más importante, ser padre de ese pequeño y brillante sol que llegó a mis días para enseñármelo todo, siendo la mejor aventura que podré vivir a su lado, el protagonista de mi cuento infinito, mi motor para avanzar día a día, el bastón que sabe sostenerme ante cada posible caída.  Ese nene que fue buscado y terminó siendo el más esperado, resultó ser el cielo más amado y venerado, mi príncipe.  Iván es mi mundo y mi sonrisa, nutre mi alma con su frescura e inocencia purificando mi ser con cada una de sus monerías y ocurrencias. Jun

Abrazos más que abrazos.

Cada vez me abrazas más, con más fuerza y con más ganas, y yo encantadisimo de ello, de que me inundes con tu dulzura y con tu cariño. Hoy me he quemado por el sol, pero me llevo en el recuerdo un día que jamás olvidaremos, donde no han faltado abrazos y más abrazos, en un lugar donde me gustaría vivir alguna vez, contigo claro. Entre los momentos, abrazos, risas, viajes, hoteles, espectáculos, ferias, besos, ...... y nuestro lenguaje particular, estamos construyendo una complicidad tan grande y bonita, que algún día nos la contaremos mirándonos a los ojos con una sonrisa en la cara y una alegría en la mirada. Los abrazos siguen sumando a nuestro cariño más sincero donde cada uno de ellos va lleno de ese amor incondicional, de esa dulzura, de ese acercamiento a no saber vivir el uno sin el otro.

Algún día.

Me imagino algún día a mi niño cuando él sea mayor, pensando y hablando que un día tuvo un padre maravilloso, que todo giraba en torno a ellos dos, que su padre se disfrazaba de cómico cuando la tristeza le comía por dentro para arrebatarle la mejor de sus risas, que la única ilusión y felicidad de su padre era verle feliz, que le llevaba cada fin de semana a un lugar distinto, con la compañía siempre de la fuerza de la unión que ambos se tenían.  Porque algún día espero que me recuerde como un padre que hizo todo lo que pudo y más por él, luchando para conseguirlo y brindarle la mejor de las infancias. Porque la magia que tienen algunas personas forjan un gran carácter. 

Forjándonos los dos.

Cuanto más tiempo pasamos juntos y más te miro, más me doy cuenta de que eres el único ser que nunca me va a fallar, a decepcionar ni a engañar, eres tan dulce, cariñoso y bondadoso que se me parte el alma cuando me dices "papi, te quiero mucho". Éstos días que estamos juntos, es difícil explicarte el por qué todo el mundo lleva eso en la boca, el por qué cada parque que quieres ir está blindado mientras las terrazas, playas, piscinas y calles están llenas de gente sin "eso en la boca". Es difícil de explicartelo con palabras de niños, tan sólo miras hacia abajo y te conformas porque no ves a más niños haciendo lo que tanto les gusta que no es otra cosa que jugar y saltar en un parque, privatizando una niñez que nunca volverá. Quizá algún día entiendas que éste, es un mundo de locos apto para adaptarte a cualquier cosa que se nos imponga excepto la coherencia y la razón. Pase lo que pase, siempre estaré aquí, a tu lado, ayudándote y haciéndote la vida más fácil a

3 añitos ya.

Ya hace 3 años que viniste al mundo con esa luz, esa alegría y ese encanto que desprendes estés donde estés, sobretodo en mi corazón que te lleva muy dentro las 24 horas del día. Eres mi compañero de viaje de una vida que no quiero si tú no formas parte de ella, aunque se me rompa el corazón cada vez que te vas y te aferras a mí para no marcharte, esos momentos muy duros para los dos pero tan reconfortables a la vez por haber pasado un tiempo juntos que jamás olvidaremos. Y los muchísimos que nos quedan por pasar, porque esa es la razón de mi existir y por lo que cada mañana me levanto con una gran sonrisa al ver tantas fotos tuyas que inundan mi casa, tu casa, nuestra casa. Fotos, momentos y lugares que inmortalizan y captan un segundo de nuestras vidas, que se quedan marcadas para siempre y que algún día recordaremos juntos, porque seré el pilar más grande y fuerte de tu vida. Vamos a vivir todo lo que nos queramos llevar juntos de ésta vida. A mi niño que ya ha cumplido 3 añitos.

Viviendo juntos.

Creo que el destino me tenía preparado algo así, algo como un laberinto sin salida del que pocas cosas entiendo del día a día, pero un laberinto del que no quiero salir si tú formas parte de él, porque sólo tú le das sentido a mi vida, sólo tú me devuelves esa infancia extrañada, sólo tú sacas lo mejor de mí sin hacer nada y sólo contigo he comprendido el amor verdadero. Verte sonreír, verte feliz a mi lado, oirte mil veces llamándome Papi que purificas mi alma y limpias mis oídos, es lo mejor que me ha pasado en mi vida. Por los miles y miles momentos que nos quedan por vivir juntos, viviré con la inmensa alegría e ilusión de levantarme cada mañana.

Quién le dio la vida a quién.

Nunca pensé que mi corazón pudiera abrirse tanto a alguien, normal cuando se trata de mi niño, quien me cautiva, me hechiza, me devuelve esa niñez olvidada, me trasporta a un mundo tan inocente como irreal, tan efímero pero tan bonito e inolvidable, que hace de cada momento un amor tan grande capaz de engrandecerme el corazón, hasta que un día ya no me coja en el pecho. Cada vez juntos se convierte en un recuerdo tan vibrante como radiante. No se cuántos besos nos hemos dado hoy, más de 1000 seguro. Algún día podré decirte, GRACIAS, por devolverme tú la vida a mi, porque mi misión en ésta vida ha sido, es y será, hacerte el niño más feliz del mundo.